martes, 26 de marzo de 2024

Taller literario Nº 28 (El templo de los sueños, de Clara Tahoces)

 


Como seguidor del blog Críticas Regina Irae, últimamente me ocurre que, tras leer una de sus reseñas, me entra el gusanillo de comprobar si sus valoraciones son acertadas, en especial cuando son realmente negativas, como es el caso de la novela El templo de los sueños, de Clara Tahoces, la cual paso a analizar a continuación.

Sin embargo, antes de hacerlo debo recalcar por enésima vez que, aunque pueda parecer injusto que opine sobre una novela con solo leer uno o dos capítulos de la misma (que es lo que suelo hacer en este blog), hace tiempo que encontré la excusa perfecta para no tener que tragarme más de lo necesario ninguna clase de bodrio (para la valoración de la totalidad de la novela, confío plenamente en el susodicho blog donde hallé la reseña). Y esa excusa es la de tratar esos primeros capítulos de la misma manera que un editor o un comité de lectura de un premio literario, tentando de ser convencido o no como el texto como única carta de presentación (que se supone es cómo debería editarse algo, claro).

Al final de mi humilde análisis (el cual es mi opinión al uso de mis limitados recursos), aclararé mi impresión general y, en el hipotético caso de ser editor, si yo lo editaría o no.

Vamos allá.

 

Original: De hecho, tiempo después, me apunté a un curso del psicólogo…

Sugerido: De hecho, tiempo después me apunté a un curso del psicólogo…

Motivo del cambio: dar fluidez, la coma es innecesaria.

 

 

Original: La puerta de un balcón, en el segundo piso, se abre de golpe y permite…

Sugerido: En el segundo piso, la puerta de un balcón se abre de golpe y permite…

Motivo del cambio: dar fluidez.

 

 

Original: …la mujer se precipite contra el frío suelo.

Sugerido: …la mujer se precipite contra el frío pavimento.

Motivo del cambio: pavimento suena mejor, más contundente, es el centro de Madrid y hay pavimento; el suelo podría no estar pavimentado.

 

 

Original: Lucía un bigote espeso en el que ya se apreciaban numerosas canas. Y sus ojos, hartos del mundo.

Sugerido: Lucía un bigote espeso en el que ya se apreciaban numerosas canas. Sus ojos parecían hartos del mundo.

Motivo del cambio: las frases se ven muy extrañas al enlazarlas con una “Y”, ya que las canas no son algo tan negativo como para correlacionarlo con los ojos hartos del mundo. Se ve revuelto. La autora parece que quiere expresar cosas, pero las pone todas en el mismo bote.

 

 

Original: Le rondaban demasiados pensamientos en la cabeza a la hora de dormir y no eran buenos consejeros.

Sugerido: Le rondaban demasiados pensamientos en la cabeza a la hora de dormir, y no eran precisamente pensamientos que pudieran ser considerados como buenos consejeros.

 Motivo del cambio: aquí pasa lo mismo que la frase de arriba, se quiere expresar algo, y el lector sabe qué es, pero la forma de trasmitirlo “al papel” es confusa y desordenada.

 

 

Original: A veces le daban las tres o las cuatro de la madrugada sin poder pegar ojo. Pero lo prefería al otro tipo de insomnio…

Sugerido: A veces le daban las tres o las cuatro de la madrugada sin poder pegar ojo, pero prefería esto al otro tipo de insomnio…

Motivo del cambio: fluidez.

 

 

Original: No imaginaba por qué querría verle, aunque esperaba que no estuviera relacionado con la seguridad del recinto. Allí se cumplían todos los protocolos reglamentarios y lo que había ocurrido, una desgracia, nada tenía que ver con ello.

Sugerido: No imaginaba por qué querría verle, aunque esperaba que no estuviera relacionado con la seguridad del recinto; allí se cumplían todos los protocolos reglamentarios y lo que había ocurrido, una desgracia, nada tenía que ver con ello.

Motivo del cambio: desconexión entre frases, erre que erre con lo mismo: ideas, ganas de expresar, pero todo revuelto y algo chocante. También se ve inocente. Estas frases no me convencen.

Nota relevante: si no se imaginaba para qué querían verle pero ya sabía lo del accidente-suicidio de la mujer en el hotel además de haber sido convocado para una reunión de urgencia, muy intuitivo no es este personaje.

 

 

Original: Atravesó el vestíbulo, luego la moderna recepción y se dirigió a la primera planta, donde había una sala de reuniones bastante grande. 

Nota: otra prueba de la inocencia del texto, ya que bastante grande es irrelevante y poco acertado.

 

 

Original: De hecho, en las primeras horas de su ingreso intentó escapar del hospital en dos ocasiones. ¡Con una pierna rota! ¿Te imaginas? Ahora permanece vigilada y medicada.

Nota: creo que quiere dar a entender que está sedada, porque, medicada, si está ingresada en el hospital, pues, algún tratamiento médico tendría “por defecto”. La palabra ahora indica claramente que tomaron medidas especiales tras que ella intentara huir, pero la autora no sabe trasmitir esas ideas de manera acertada y es el lector el que dice “bueno, vale, se entiende, sigamos leyendo a ver qué pasa”.

 

 

Original: Había visitado a Conchita en el hospital en cuanto se enteró de lo ocurrido y ya sabía que tenía una pierna rota, pero no que estuviera tan aturdida. Esa clase de visitas le removía recuerdos amargos relacionados con su hija, por lo que había procurado que fuera lo más breve posible.

Nota: esto se ve todo raro. Creo que aturdida no es la palabra adecuada, además.

 

 

Original: —Los médicos dicen que es normal que no recuerde nada del último año, pero yo no pienso resignarme. No entiendo por qué ha intentado suicidarse. Ya sabes que estos meses atrás la relación con ella no era del todo fluida. Pero esto… esto me ha superado. Necesito… Necesitamos, Marcia y yo —se corrigió—, saber qué ha ocurrido.

Nota: ojalá la novela explique más delante de manera concisa y realista por qué los médicos creen que es normal que no recuerde nada del último año. ¿Por qué un año?.

 

 

Original: Marcia era su esposa, la madre de Conchita, una mujer encantadora a la que Ginés conocía bien.

Nota: lo diré de manera tajante: esta frase está suelta ahí, sin más, con dos cojones. Creo que es lo peor de todo el capítulo. Es una anotación en tierra de nadie.

 

 

Original: Por lo que tenía entendido, Conchita era una joven como cualquier otra, veintipocos años, algo caprichosa quizá. Lo habitual procediendo de una familia adinerada, pero en apariencia normal.

Nota: esto es muy raro y otro revoltijo.

 

 

Original: Sin embargo, un desengaño amoroso la había apartado de sus progenitores hacía más o menos un año

Nota: una de las ventajas del narrador es que lo sabe todo, y esta frase y sus dudas es para un personaje, no para un narrador.

 

 

Original: Su novio, con el que pensaba casarse, la había dejado por otra. Algo que Conchita no encajó bien.

Sugerido: Su novio, con el que pensaba casarse, la había dejado por otra, algo que Conchita no encajó bien.

Nota: la frase “algo” no tiene sentido. Sabemos que se refiere a que la dejaran por otro, pero no puede ir como una frase aparte de esa manera. Al menos que vaya así: Eso fue algo que ella no encajó bien. La autora sigue con lo mismo: tengo una idea, la pongo ahí, y te buscas la vida para hallar las conexiones.

 

 

Original: Seguía obsesionada con él y, pese a que había dejado embarazada a una chica del trabajo, se resistía a aceptar la realidad: que no la quería. O que, si la quiso, había dejado de hacerlo. 

Nota: pero, vamos a ver… esto es lo mismo de la frase inmediatamente anterior pero con otras palabras. No es necesario poner esto.

 

 

Original: Por eso había pasado un tiempo sin hablarse con sus padres y el contacto se había limitado a algunos mensajes de móvil a la madre.

Nota: se entiende que es a su madre, pero, ¿a la madre? Suena fatal.

 

 

Original: Sé que tú mejor que nadie me entiendes.

Sugerido: Sé que tú me entiendes mejor que nadie.

Nota: la frase original es de Yoda.

 

 

Original: Estaba en lo cierto. Ginés había perdido a su única hija cuando esta tenía una edad similar a la de Conchita, veintitantos.

Sugerido: Estaba en lo cierto; Ginés había perdido a su única hija cuando esta tenía una edad similar a la de Conchita, veintitantos.

Nota: actitud súper-extraña del narrador. He cambiado algo, pero no me convence nada.

 

 

Original: Y, aunque habían transcurrido ocho años, aún le daba vueltas a si se había tratado de un accidente o un suicidio.

Sugerido: Y, aunque habían transcurrido ocho años, aún le daba vueltas a si se había tratado de un accidente o de un suicidio.

Nota: el narrador sigue contando las cosas de manera extraña. Se dan datos, sin tejer las frases. Se suelta todo como los números que salen de bolas de un bingo.

 

 

Original: ¿Cómo negarse ante la petición desesperada de su amigo?..... Su amigo respiró profundamente…

Nota: la palabra amigo muy mal empleada.

 

 

Original:  al empleado que había cubierto la guardia la noche del incidente. Este no se hallaba en el inmueble, 

Nota: un conserje jamás está de guardia, está cubriendo el turno de noche. No es el ejército o un hospital. Parece una tontería, pero es muy distinto. Decirlo así suena raro, como pilotar un autobús escolar en lugar de conducirlo. Desconexión total del mundillo laboral.

 

 

Original: En la mesilla de noche, el personal del hotel había encontrado un botón dorado desgastado. Pidió verlo. Era como si de tanto tocarlo, hubiera perdido parte de su brillo. Ginés lo anotó en su cuaderno y sacó una fotografía del botón. Acto seguido se lo guardó en el bolsillo.

Sugerido: En la mesilla de noche, el personal del hotel había encontrado un botón dorado y desgastado. Pidió verlo. Era como si, de tanto tocarlo, hubiese perdido parte de su brillo. Ginés lo anotó en su cuaderno y le sacó una fotografía. Acto seguido se lo guardó en el bolsillo.

Nota: aquí hace todo lo contrario a lo anterior; ya se sabe que estamos hablando del botón y lo cita de nuevo. ¿A qué otra cosa le iba a sacar una foto?

 

 

Bueno, aquí lo dejo porque ya sé de qué cojea este texto.

Ahora, antes de dar mi opinión, voy a ir a uno de mis dos hijos (el de veinte años de edad) y le voy a preguntar si entiende los cambios, y juro anotar de seguido las conclusiones reales de alguien sin experiencia literaria.

…Tras hacerlo (aunque no me ha aguantado sino tres o cuatro correcciones antes de querer ir a sus asuntos) le parece absurdo lo del botón y comprendió el conflicto como tal prácticamente antes de explicárselo.

También sabe que un conserje no hace guardias, y me cito que lo de empleado suena extraño e inadecuado.

 

Por tanto, mis conclusiones son que, si bien hay algún tipo de hilo conductor, todo está como a trancas y barrancas. Comparto la percepción de borrador que cita el blog que ha dado pie a este post. Y no solo de borrador, sino de la necesidad de reestructurar todo a un nivel más que profundo… que casi mejor cambiar de autor que de historia, vamos.

 

Así pues, tanto como editor o como miembro de un jurado literario, esta novela no pasaría la criba. No sé cómo sigue la historia, si es tremenda o me pierdo el libro de mi vida, pero se nota una inocencia y una incapacidad de transmitir literatura que echa para atrás. Parece que hayan comercializado esto para hacer un favor. No lo entiendo.


domingo, 25 de febrero de 2024

Taller literario Nº 27 (Bajo tierra seca, de César Pérez Gellida, Premio Nadal 2024)

 Bajo tierra seca, de César Pérez Gellida, Premio Nadal 2024.


Pues ya tengo entre manos Bajo tierra seca, trabajo ganador del Premio Nadal 2024 (30.000 euros), escrita por César Pérez Gellida.

 

Vamos al lío.

 

(Descripción de un sujeto sospechoso con una cicatriz en la mejilla caminando de un lado a otro en una estación de tren).

Fragmento original: Un mono azul de faena abierto hasta el pecho sobre una camiseta de tirantes que un día fue blanca y una gorra de obrero completan su atuendo.

Sugerido: Un mono azul de faena abierto hasta el pecho sobre una camiseta de tirantes(,) que un día fue blanca(,) y una gorra de obrero completan su atuendo.

 

 

Original: Tanto de su aspecto como de su complexión física podría decirse que, si bien en sus años mozos podía presumir de ser un tipo apuesto, hoy día no hay mujer en edad de merecer que se fije en él.

Sugerido: Tanto de su aspecto como de su complexión física podría decirse que, si bien en sus años mozos presumió de ser un tipo apuesto, hoy día no habría mujer en edad de merecer que se fijase en él.

 

 

(Un guardia civil se fija en él porque le parece sospechoso).

Original: Tampoco su frenético ir y venir, más propio de un padre primerizo que de alguien que aguarda la llegada del tren.

(Nota: se entiende que el autor se refiere a un padre primerizo esperando durante el parto de su mujer o pareja, pero queda algo extraño y no sabemos a qué clase de situación de un padre primerizo se refiere. ¿Un padre primerizo… haciendo qué?).

Sugerido: Tampoco su frenético ir y venir, más propio de un padre primerizo en el parto de su esposa que de alguien que aguarda la llegada del tren.

 

 

(La pareja de guardias civiles van a por él).

Original: Sígueme —le ordena colgándose al hombro la Remington, una carabina que, igual que él, cuenta con más de veinte años de servicio.

Sugerido: Original: Sígueme —le ordena(,) colgándose al hombro la Remington, una carabina que, igual que él, cuenta con más de veinte años de servicio.

 

 

Original: Contrariado, el hombre de la cicatriz en el rostro busca su cédula personal en el bolsillo trasero del pantalón sin soltar la bolsa, detalle que no se les escapa a los guardias. El cabo Aguado consiente que sea Lobito quien la compruebe, como si él no estuviera para tareas menores.

Sugerido: Contrariado, el hombre de la cicatriz en el rostro busca su cédula (eliminar personal) en el bolsillo trasero del pantalón sin soltar la bolsa, detalle que no se les escapa a los guardias. El cabo Aguado consiente que sea Lobito quien la compruebe, como si él no estuviese para esa clase de tareas menores.

 

 

Original: Román Aguado es el primero en reaccionar alargando el brazo con la intención de agarrar al sospechoso de la solapa, pero este responde con un rápido puñetazo antes de lanzarse a las vías y cruzarlas bajo la atónita mirada de los presentes.

Sugerido: Román Aguado es el primero en reaccionar alargando el brazo con la intención de agarrar al sospechoso de la solapa, pero éste responde con un rápido puñetazo antes de lanzarse a las vías y cruzarlas bajo la atónita mirada de los presentes.

NOTA: Según la normativa actual de la Real Academia Española (RAE) establecida desde 2010 en la Ortografía de la lengua española, los pronombres demostrativos "éste", "ésta", "éstos", "éstas" (y sus equivalentes en masculino y plural) ya no deben llevar tilde en la mayoría de los contextos.

¡Qué pena! Otra adaptación al mundo actual para facilitar el acceso a la lengua, como a tantas otras cosas y que nada nos cueste un poco más de esfuerzo.

 

 

 

Original:  Dos posibilidades se le plantean: seguir corriendo hacia la tapia que rodea la estación, saltarla y tratar de despistar a su perseguidor en el entramado de callejuelas; o bien colarse en el almacén abandonado de la izquierda y buscar el modo de sorprenderle y anularle.

NOTA: persecución sistemática, como una descripción de guión de cine. “…De la izquierda”, no es muy adecuado citar izquierda o derecha, ya que no tiene sentido adónde esté situado, siendo un “valor” intrascendente que comunicar al lector.

 

 

Original: Lobito, que lo ha visto entrar, desenfunda su revólver y lo amartilla antes de echar un vistazo sin asomar demasiado la cabeza. Dentro, la penumbra reinante parece luchar contra las zonas iluminadas por los rayos de sol que se filtran a través de las muchas imperfecciones de la cubierta. El descenso de temperatura es lo primero que nota el guardia civil al poner las botas en el suelo, cubierto por una fina capa de polvo sobre la que se han impreso las huellas del calzado de Padilla.

Sugerido: Original: Lobito, que lo ha visto entrar, desenfunda su revólver y lo amartilla antes de echar un vistazo sin asomar demasiado la cabeza. Dentro, la penumbra reinante parece luchar contra las zonas iluminadas por los rayos de sol que se filtran a través de las muchas imperfecciones de la cubierta. El descenso de temperatura es lo primero que nota el guardia civil al poner las botas dentro, en un suelo cubierto por una fina capa de polvo sobre la que se han impreso las huellas del calzado de Padilla.

NOTA: en el original nunca dice que ha entrado. Parece que el personaje estaba volando y al fin aterrizó, o algo así.

 

 

(El autor quiere introducir el desayuno del guardia civil, que pronto tomará protagonismo cuando lo vomite al ser pateado en el estómago)

Original: Hay días, como hoy, en que la suerte le sonríe y ha podido hincar el tenedor en unas migas que sobraron de la cena, y, quizá distraído en las reminiscencias del ajo, el  pimentón y la panceta que aún permanecen en el paladar, Lobito no se percata de un movimiento que se produce a su espalda.

NOTA: O sea, el guardia civil está en plena persecución y se distrae un segundo por el sabor del desayuno en su boca… Extraño, y algo cómico. En general, la persecución

 

 

Original: Acurrucado en posición fetal, logra evitar los daños severos que las primeras patadas le habrían provocado en la cabeza, no así los causados por las tres siguientes, en el estómago y el bajo vientre. Lo último que recordará el guardia civil Pedro Lobato, alias Lobito, será que las migas recorrieron el mismo camino pero en sentido contrario antes de salir de su boca.

Sugerido: En posición fetal y protegiéndose  la cabeza, logra evitar las severas heridas que las primeras patadas le habrían provocado en el rostro, quizá hasta en el cráneo, pero no así los traumatismos causados por las tres siguientes en el estómago y el bajo vientre. Lo último que recordará el guardia civil Pedro Lobato, alias Lobito, será que las migas de su desayuno recorrieron entonces el mismo camino que en aquella mañana, pero en sentido contrario antes de salir proyectadas por su boca.

 

 

 

(Segunda posible situación cómica o extraña, ya que el villano parece que también va a vomitar al ver que el guardia civil ha vomitado).

Original: Contagiado por el olor a vómito, Jacinto Padilla no puede evitar que las náuseas y las arcadas lo sacudan, y se aparta para no vomitar sobre el rubio cabello del muchacho al que acaba de dejar inconsciente, lo cual es cuando menos paradójico, dado que ha sido capaz de consumar sin inmutarse actos que harían palidecer a cualquier ser humano.

Sugerido: Afectado por el olor a vómito, Jacinto Padilla no puede evitar que las náuseas y las arcadas lo sacudan, y se aparta para no vomitar sobre el cabello rubio del muchacho al que acaba de dejar inconsciente, lo cual es cuando menos paradójico, dado que ha sido capaz de consumar sin inmutarse actos que harían palidecer a cualquier ser humano.

 

 

Original: Tras recoger el revólver del suelo y guardarlo en la bolsa de viaje, que no piensa soltar, emprende la carrera hacia la puerta corredera que ha localizado en la esquina opuesta.

Sugerido: Tras recoger el revólver de su víctima del suelo y guardarlo en la bolsa de viaje, que no piensa soltar, emprende la carrera hacia la puerta corredera que ha localizado en la esquina opuesta.

NOTA: se da por sentado en el revólver cae de la mano del guardia civil, pero hay muchas descripciones cruciales que se podrían haber incluido en lugar de muchos detalles mundanos.

 

 

Original: Sin embargo, por esa rendija se cuela la culata de una Remington que impacta con extrema violencia en la boca de Padilla, provocando que pierda la verticalidad. De espaldas en el suelo, dolorido, introduce la mano en la bolsa buscando el arma, pero el cañón que le apunta a la cara le disuade.

Sugerido: Sin embargo, por esa rendija se cuela la culata de una Remington que le impacta con extrema violencia en la boca, provocando que pierda la verticalidad. De espaldas en el suelo, dolorido, introduce la mano en la bolsa buscando el arma, pero el cañón que le apunta a la cara le disuade.

NOTA: En toda la descripción de los hechos se habla siempre del mismo personaje, por lo tanto sobra citar su nombre otra vez ya que no hay confusión posible.

 

 

 

Aquí termina la introducción a la novela.

En general hay cosas buenas, y algunos detalles que me gustaron… como:

 

Esto: Es tener la certeza de que si ella se lo pidiera de nuevo, volvería a hacerlo sin dudarlo. Volvería a matar a sangre fría. Volvería a desmembrar un cuerpo. Volvería a alimentar a los marranos con su carne.

O esto: Como un animal salvaje enjaulado, el hombre de la cicatriz en el rostro camina de un lado a otro sin levantar la mirada de las desgastadas puntas de sus zapatos.

 

Pero… en general, el texto resulta un poco inocente y falto de personalidad, acartonado, sin sorpresas.

 

NOTA: este post ha sido inspirado en el artículo encontrado en la siguiente dirección web: